SEGURIDAD VIAL Y CONTROL DEL TRANSPORTE

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¿QUÉ NOS PROPUSIMOS?

En la Argentina, la siniestralidad vial causa la muerte de más de 5.000 personas cada año y es la primera causa de mortandad para jóvenes de entre 15 y 34 años. Una realidad que nos toca a todos y que sólo es posible revertir con diagnósticos adecuados y políticas de Estado consistentes, algo muy distinto a lo que ocurría hasta diciembre de 2015.

Para cambiar esa realidad, pusimos en marcha el Plan Nacional Integral de Seguridad Vial, con la convicción de que para lograr resultados debíamos trabajar en equipo con todas las provincias y abordar el tema desde una perspectiva integral.

Un gran paso adelante, con el que profesionalizamos la Agencia Nacional de Seguridad Vial y la Comisión Nacional de Regulación del Transporte y salvamos vidas, porque con cada paso que damos para mejorar la seguridad vial, estamos cuidando a millones de argentinos.

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¿QUÉ RECIBIMOS?

Una normativa desactualizada y poco adaptada a las nuevas tecnologías.

Falta de estadísticas y metodologías confiables sobre cómo y dónde ocurren los siniestros viales, lo que no nos permitía realizar diagnósticos adecuados.

Observatorios viales provinciales en sólo dos provincias y con muy bajos niveles de desarrollo.

Agentes de control de Seguridad Vial imposibilitados de labrar infracciones.

Una Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT) poco orientada al control, con muy bajos niveles de productividad por fiscalizador y un gran solapamiento de funciones entre los organismos.

Fiscalizaciones que se realizaban en papel, lo que generaba que cada control durase más de 40 minutos y que los fiscalizadores solo pudieran realizar 6 controles al día.

Una multiplicidad de licencias de conducir con requisitos y niveles de exigencia muy variados y una multiplicidad de registros de infractores por jurisdicción que volvía más difícil el control al momento de habilitar a un conductor.

La licencia profesional se emitía sin los cruces de seguridad necesarios, con bajos estándares de transparencia y seguridad.

Un Sistema Nacional de Infracciones que sólo alcanzaba al 3% de la población.

Falta de tecnología informática aplicada al control del transporte.

Desconocimiento de los costos asociados a los siniestros viales.

Bajos niveles de respuesta a los reclamos recibidos por los ciudadanos y un Estado ausente en la instancia post siniestro.

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¿QUÉ HICIMOS?

Pusimos en marcha el Plan Integral de Seguridad Vial, con 4 ejes clave: la calidad de la información, las obras de infraestructura del Ministerio de Transporte, el control y la coordinación, y el cambio cultural y la actualización normativa.

Calidad de la información

Sumamos nuevos observatorios provinciales. Hoy, tenemos 19. Y logramos que, por primera vez, las 24 jurisdicciones del país reporten sus datos.

Desarrollamos un Sistema Integrado de Gestión de Información de Seguridad Vial (SIGISVI), que permite registrar información sobre seguridad vial, normalizando e integrando los datos georreferenciados disponibles en todo el territorio nacional.

Publicamos las estadísticas, informes y estudios con datos de todo el país.

Mayor control y coordinación

Logramos que las tareas de control se trabajen de forma coordinada entre la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) y la Comisión Nacional de Regulación de Transporte (CNRT).

Mejoramos la articulación de los organismos con Gendarmería y las policías provinciales.

Trabajamos en coordinación con el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos y el Ministerio de Salud y Desarrollo Social.

Colaboramos con los organismos Nacionales, Provinciales, Municipales y privados competentes, con el fin de aunar esfuerzos y recursos para satisfacer los requerimientos de las víctimas y sus familiares.

Sumamos más fiscalizadores, más horas a los controles y lanzamos el nuevo sistema de fiscalización inteligente, incorporando nuevas herramientas de última generación (cinemómetros -láser infrarrojo-, radares, PDAs y drones) que nos permiten realizar más y mejores controles.

Capacitamos a los agentes para actuar técnica, profesional y emocionalmente ante siniestros viales (primeros auxilios, RCP y asistencia).

Federalizamos los operativos de verano y de invierno para vehículos particulares, de pasajeros y de cargas en los corredores turísticos del país.

Inauguramos 14 nuevas unidades de control psicofísico para conductores de servicios de larga distancia y 1 para conductores de cargas en la ciudad de Uspallata.

Abrimos 4 nuevas subdelegaciones de Control del Transporte en pasos fronterizos (Orán, Puerto Iguazú, San Rafael, y Paso de los Libres) que se suman a las también abiertas en Concepción del Uruguay, Río Cuarto y a la Delegación de La Pampa.

Comenzamos a auditar los talleres de revisión técnica para garantizar la seguridad de los vehículos de carga y pasajeros, protagonistas de siniestros viales graves.

Traspasamos a la ANSV la responsabilidad de emitir la Licencia Nacional de Transporte Interjurisdiccional (LINTI) elevando las exigencias para así garantizar una conducción profesional segura. Unificando criterios, procesos, requisitos y bases de datos.

Diseñamos un nuevo formato de la Licencia Nacional de Conducir (LNC) con mayores estándares de seguridad, para consultar de manera inmediata la validez de la licencia, con licitaciones transparentes y competitivas que nos permitieron bajar los costos de emisión en un 44%.

Lanzamos la Licencia Nacional de Conducir digital, con mejores niveles de seguridad, que permite hacer controles más rápidos y confiables, consultando los datos en tiempo real.

Desarrollamos un nuevo Certificado Nacional de Antecedentes de Tránsito, gracias al que pudimos fortalecer la red informática interjurisdiccional donde se asienta la información.

Ampliamos la base del Registro Nacional de Infractores y unificamos criterios para la realización de infracciones, cómo y dónde colocar los radares y sus características, etc.

Diseñamos el Proyecto Nacional de Scoring, consensuando el núcleo de infracciones graves que generarán la quita de puntos. Acordamos el sistema de recuperación, la capacitación y aprobación de un curso en materia de seguridad vial.

Creamos el Documento universal de transporte (DUT). Que consiste en una declaración jurada obligatoria que realizan los transportistas antes de cada viaje. Este documento le permite a la ciudadanía saber si la empresa, el vehículo y los conductores están habilitados y en condiciones de prestar el servicio. Y a los operadores del transporte les simplifica su trabajo.

Impulsamos 3 medidas contra el transporte clandestino: se aumentó el período de retención a 20 días; se duplicaron los valores de las multas y se incrementó el 260% el valor de restitución del vehículo ilegal retenido.

Incrementamos las fiscalizaciones a viajes estudiantiles, comunicando la disponibilidad de este servicio e incorporamos charlas educacionales a todos los pasajeros.

Desarrollamos un manual de Auditorías en Seguridad Vial de la infraestructura vial por primera vez en Argentina.

Cambio cultural y actualización normativa

Lanzamos 3 campañas nacionales en televisión, medios gráficos, redes sociales y vía pública para concientizar sobre la importancia del uso del cinturón de seguridad y el casco.

Avanzamos en la incorporación de la licencia especial para conductores de cuatriciclos, generando una norma para que los municipios definan por donde pueden transitar.

Hicimos obligatoria la utilización del Sistema de Retención Infantil (SRI) en menores de hasta 10 años.

Establecimos la obligatoriedad de usar el cinturón de seguridad en los viajes en micros de larga distancia.

Otorgamos poder de constatación a los agentes de tránsito en todas las rutas nacionales.

Conformamos la primera Red Federal de Asistencia a Víctimas y Familiares de Víctimas de Latinoamérica.

Desarrollamos un Protocolo de Actuación ante Siniestros Viales de aplicación nacional y a implementarse por todas las fuerzas que intervienen en el lugar del hecho (en proceso de validación por el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos).

Firmamos el primer acuerdo con la industria de moto vehículos para la incorporación de 5 ensayos de seguridad. Se realizan pruebas para verificar la estabilidad de la moto; el tanque de combustible en caso de impacto; la carrocería saliente en caso de impacto con un tercero para que no sea de peligro; traba de manillar y dirección; y, elementos de sujeción para sus ocupantes.

Qué logramos

¿QUÉ LOGRAMOS?

Redujimos el tiempo de cada control de 40 a 8 minutos en pasajeros y de 60 minutos a 10 minutos en cargas, eliminando por completo el uso del papel en la fiscalizaciones de CNRT.

Incrementamos los controles al transporte público de pasajeros y cargas en un 200%, de 329.000 en 2016 a 1.100.000 en 2019. Tan solo durante el operativo verano, pasamos de 30.000 controles en 2016 a 452.000 en 2019.

Incrementamos 1.664% las retenciones y multas labradas a vehículos clandestinos, pasando de 17 en 2016 a más de 350 entre 2018 y 2019, cuidando aproximadamente más de 6.000 vidas a bordo.

Aumentamos en 230% los controles a los colectivos que transportan contingentes de estudiantes, pasando de los 454 que hicimos en 2016 a más de 1.100 en 2019.

Ampliamos la cobertura de la Licencia Nacional de Conducir del 76% al 88%, sumamos 167 nuevos centros de emisión en todo el país y 915.349 ciudadanos ya se descargaron su licencia digital.

21 provincias suscribieron el acta de intención y compromiso al Programa Nacional de Scoring.

Gracias a la nueva Licencia Nacional de Transporte Interjurisdiccional (LINTI) emitida por la ANSV que eleva las exigencias para obtenerla y garantiza más seguridad, inhabilitamos 1.634 choferes que no estaban en condiciones de conducir vehículos con pasajeros.

Desarrollamos y fortalecimos 19 Observatorios Provinciales.

Por primera vez contamos con una estimación de costos de la Seguridad Vial en la Argentina.

En el Sistema Nacional de Administración de Infracciones, pasamos de contar con 23 convenios en los que se incluía a 1.342.000 habitantes, a 149 acuerdos firmados con distintas jurisdicciones (entre las que se incluyen 15 capitales) y un total de 8.074.392 personas.

Logramos que el 83,8% de la población esté incluida en el sistema para reportar antecedentes, normalizando el reporte total de la Pcia. de Buenos Aires.

Conseguimos emitir más de 170.000 DUTs con la CNRT, desde el 4 de junio de 2019 cuando se implementó.

Crecimos un 1455% con respecto a las alcoholemias realizadas en el año 2016. En lo que va del año 2019, se llevan realizados 168.345 test de alcoholemia, que equivale a 809 controles diarios.

HITOS DEL PLAN INTEGRAL DE SEGURIDAD VIAL